El Banco de Corea elevó el jueves 26 el tipo de referencia 0,25 puntos hasta el 0,75%. Se trata de la primera subida en 15 meses, desde mayo de 2020, la cual llega tras dos recortes efectuados en 2020 -del 1,25% al 0,75% en marzo y hasta el mínimo histórico del 0,5% anual en mayo- y mantener las tasas de interés en ese mismo nivel desde entonces. 

El aumento, decidido por primera vez en casi un año y medio, refleja la recuperación económica impulsada por las exportaciones y las inversiones, así como el severo desequilibrio en el mercado financiero, representado por la burbuja inmobiliaria y el disparo de la deuda de los hogares, que inquieta a las autoridades. Además, implica un cambio en la postura de las autoridades monetario-financieras, de mantener bajos los intereses a optar por medidas más restrictivas.

La subida, de hecho, fue anticipada ya desde mayo por el banco central. Incluso su gobernador, Lee Ju Yeol, comentó en julio que considera necesario iniciar en agosto un debate sobre si es adecuado mantener las políticas monetarias expansivas en el grado actual, dando lugar a especulaciones sobre un aumento del tipo de referencia en este mes. 

Asimismo, influyó en la decisión de elevar las tasas de interés el avance de la campaña nacional de vacunación. 

En cuanto a la economía en general, el Banco de Corea vaticina un crecimiento del 4% para 2021, sin alterar su previsión previa, tomando en cuenta tanto la mejora de las exportaciones, las inversiones y otros factores positivos, como aspectos negativos tales como la cuarta ola de contagios y el subsiguiente empeoramiento del sentimiento del consumidor. 

Pronostica además que el precio al consumidor subirá un 2,1% en 2021, siendo este margen más pronunciado que el estimado anteriormente del 1,8%, ante el encarecimiento del crudo y las materias primas.