A partir del jueves 11 las distribuidoras de urea y de soluciones de urea deben presentar a las autoridades informes diarios sobre su operativa, mientras que la venta de fluidos de escape para diésel se limitará a las estaciones de servicio a nivel nacional. 

Estas son algunas de las medidas de emergencia activadas por el Ministerio de Comercio, Industria y Energía y el Ministerio de Medio Ambiente para superar la escasez de urea en el mercado surcoreano. 

Así, cualquiera que importe o venda urea y soluciones acuosas de este componente, o produzca fluidos de escape para diésel, estará obligado a declarar cada día el volumen distribuido en el país y también el inventario. En tanto, los importadores de urea deberán notificar la cantidad que planean traer del exterior durante los próximos dos meses, para que el Gobierno pueda anticipar posibles desequilibrios entre oferta y demanda a futuro. 

Por otra parte, la venta de fluidos de escape para diésel solo podrá realizarse en las estaciones de servicio, con un máximo de diez litros por cada auto y hasta treinta litros por cada camión, ómnibus o vehículo agrícola o de construcción. Como excepción figuran las ventas mediante contrato directo con constructoras o empresas transportistas. 

Además, la reventa de soluciones acuosas de urea para coches queda prohibida, mientras que si un distribuidor es descubierto realizando prácticas especulativas o intentando monopolizar la oferta, las autoridades podrán ordenarle ceder las existencias de ese producto químico a otro importador o distribuidor. 

Cualquier incumplimiento de las medidas de emergencia podrá conllevar sanciones de hasta tres años de prisión o multas de hasta 100 millones de wones. 

Estas medidas estarán vigentes temporalmente hasta fin de año.