El cohete Nuri está de nuevo en posición vertical y listo para el lanzamiento, cinco días después del día 15, fecha en que fue retirado de la plataforma tras detectar unas anomalías en los sensores del tanque de oxidante de la primera etapa. 

Tras concluir los preparativos para poner en órbita el vehículo espacial, el fallo obligó a los científicos a postergar el lanzamiento y llevarlo nuevamente al centro de ensamblaje para examinarlo. Finalmente, optaron por reemplazar algunos repuestos clave, en vez de desensamblar la primera etapa del cohete.

Al finalizar la revisión y verificar durante el fin de semana la ausencia de anomalías, el Instituto de Investigación Aeroespacil de Corea (KARI) reprogramó el lanzamiento del Nuri para las 4:00 de la tarde del martes 21. Así, el lunes 20 por la mañana procedieron a trasladarlo a la plataforma y ubicarlo verticalmente. De no surgir complicaciones adicionales, los preparativos finalizarán al conectar los cables umbilicales para cargar electricidad, combustible y oxidante, y asegurar que todo esté bien. 

Aunque el lanzamiento está previsto para la tarde del 21 de junio, decidirán en el último momento, considerando el estado del cohete, las condiciones climáticas y las probabilidades de chocar contra otros vehículos u objetos espaciales.

En cuanto a la previsión del tiempo, la Administración de Meteorología dio a conocer que en la localidad de Goheung al extremo suroeste de Corea, donde se sitúa el Centro Espacial Naro, el cielo está nublado y soplan vientos de entre uno y tres metros por segundo. Aunque se esperan lluvias ligeras para el martes 21, la lluvia no supone un gran impedimento para lanzar el cohete, pero los relámpagos sí podrían interferir. Por ahora los científicos permanecen atentos a la evolución de las precipitaciones y otras condiciones atmosféricas de la zona.