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La Tercera Comisión de la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó el día 17 una nueva resolución sobre derechos humanos norcoreanos, condenando las repetidas vulneraciones al respecto por parte de ese país, y exhortando a Pyongyang a detenerlas. Así, la ONU adoptó una resolución de dicha índole por decimoséptimo año consecutivo, esta vez por unanimidad y sin votación.

En cuanto al contenido, esta nueva versión no se distancia mucho de las de años anteriores pues incluye pocas novedades, como el llamado al régimen norcoreano a cooperar para una oportuna distribución de la vacuna contra el COVID-19, o las críticas sobre cómo conculcan los derechos humanos de prisioneros de guerra y sus descendientes.

En tanto, la frase que figura en la resolución por octavo año consecutivo desde 2014 es la que recomienda presentar la situación de los derechos humanos en Corea del Norte ante la Corte Penal Internacional, y también implementar sanciones adicionales contra los máximos responsables, señalando implícitamente al número uno del régimen de Pyongyang, Kim Jong Un.

Como más graves violaciones de derechos humanos cometidas en Corea del Norte la resolución menciona torturas, detenciones arbitrarias, violencia sexual, existencia de campos de concentración para presos políticos, desapariciones forzosas y falta de libertad de movilidad. Así, condena a Corea del Norte por vulnerar sistemática y ampliamente los derechos humanos de sus ciudadanos, al tiempo de denunciar otras prácticas como el tratamiento inhumano a desertores repatriados, los límites a la libertad de religión, expresión y de asamblea o el restringido ejercicio de derechos económicos, sociales y culturales de los norcoreanos ante la pandemia.

En tanto, otro punto a destacar es que la nueva resolución de la ONU insta a Pyongyang a reanudar los reencuentros intercoreanos de familias separadas, y a repatriar inmediatamente a los ciudadanos japoneses secuestrados por sus agentes en el pasado.

La aprobación del documento en la Tercera Comisión fue liderada por los estados de la Unión Europa, y esta vez también contó con el apoyo de Corea del Sur, después permanecer fuera de la lista de promotores durante tres años.

La resolución será presentada a Asamblea General de ONU y posiblemente será aprobada, pese a que fue refutada por Kim Song, embajador norcoreano ante Naciones Unidas, quien alegó que todo lo descrito no existe en Corea del Norte y que la resolución es resultado de las políticas hostiles contra su país.