ⓒYONHAP News

El 13 de diciembre se cumplieron exactamente treinta años del establecimiento del Acuerdo sobre Reconciliación, no agresión y cooperación para intercambio entre las dos Coreas, referido en forma abreviada como Acuerdo Intercoreano Básico.

Compuesto por cuatro capítulos y 25 artículos, la primera frase de este pacto dice: “El Sur y el Norte reconocen y respetan el régimen de la contraparte”. A partir de ahí, aboga por impulsar acciones destinadas a promover una declaración conjunta sobre desnuclearización de la península coreana y por fomentar tanto la reconciliación mutua, como el principio de no agresión y los intercambios bilaterales.

Sin embargo, aunque después de la firma fue ratificado por el entonces líder supremo y fundador de Corea del Norte, Kim Il Sung, en Corea del Sur solo fue avalado por el presidente y no obtuvo la aprobación del Parlamento. Aún así, el acuerdo sigue operando como marco base de las relaciones intercoreanas, siendo válida hasta el día de hoy su definición sobre las relaciones entre las dos Coreas. El acuerdo también destaca la peculiaridad de esas relaciones, al afirmar que difieren de las habituales entre dos Estados, y recoge que evolucionarán en sintonía con el proceso hacia la reunificación.

El Acuerdo Intercoreano Básico ha sido el punto de partida de otros pactos que Seúl y Pyongyang firmaron en años posteriores, sobre todo después de la primera Cumbre Intercoreana del año 2000. También fue ampliado con anexos sobre cooperación ante desastres naturales y otras catástrofes, así como sobre intercambios económicos y desarrollo conjunto de recursos naturales.

Asimismo, sirve como base al Acuerdo Militar del 19 de septiembre, establecido en el año 2018 con el objetivo de traducir en acciones lo pactado entre las dos Coreas, comprometiéndose a la no proliferación de armas ni efectivos en la frontera y a no realizar actividades de reconocimiento o vigilancia sobre el territorio de la contraparte.