Estamos en una academia de baile que enseña las coreografías que salen en la televisión. A ritmo de una música rápida y divertida, decenas de personas se mueven al unísono siguiendo las indicaciones de la profesora de baile. Cuando termina la clase, con el cuerpo sudado pero mucho más ligero, todos aplauden entre risas. Cada vez más gente se interesa y el número de personas que se inscriben a las clases aumenta todos los meses. Antes en su mayoría era gente que quería hacer ejercicio de forma divertida, pero cada vez son más los que quieren aprender para tener una habilidad que mostrar al resto. Ahora visitamos una academia de ballet.



Al ritmo de una música mucho más tranquila, pero igualmente alegre, las alumnas siguen las indicaciones de la profesora. Los movimientos de estiramiento del ballet afinan las líneas del cuerpo y estimulan hasta los músculos más pequeños, que no suelen usarse normalmente, por lo que es el ejercicio perfecto para modelar la figura. Hasta los hombres se están dando cuenta de los muchos beneficios que otorga el ballet. Antes se pensaba que el ballet era para personas que querían ser bailarines profesionales, pero ahora se ha generalizado la idea de que es un tipo de ejercicio más. Lo esencial en el ballet, antes que el propio baile, es conseguir una buena postura, mejorar la flexibilidad y el equilibrio, y los ejercicios de estiramiento están destinados a este fin. Para aquellos que les parezca aburrido bailar solos, hay muchos bailes que se pueden practicar en pareja, como el swing, el jazz, la salsa, el tango o el vals.



Al tener que coordinar todo el tiempo los movimientos con el otro, mejoran los reflejos y la concentración. Hoy visitaremos una academia de tango que se llama “Tango School”. Como es un club de tango, cuya matrícula de inscripción es muy económica. La mayoría de los socios son oficinistas de más de 20 y 30 años. Bailando tango, se liberan del estrés y de la vida monótona del trabajo. Uno de los aspectos más atractivos del tango es que es un baile agarrado.



En este sentido, reconforta y acerca mucho a las personas. Por algo lo definen como una danza de un solo corazón y cuatro piernas. Por esta razón, en comparación con el swing o la salsa, el tango requiere mucha sincronización, no sólo de cuerpo, sino también del alma. Gracias a este club y academia de tango, los socios pueden ampliar sus relaciones sociales y también saber más sobre la sabiduría de la vida; pues bailando tango se aprende cuándo hay que liderar, cuándo hay que dejarse llevar, cómo hay que ir hacia adelante y cómo hay que retroceder, cuándo hay que mostrarse fuerte, y cuándo dúctil y maleable.