El año 2014 es el año del caballo en el calendario lunar. El caballo simboliza la fuerza y la velocidad, pero en particular este año es el año del caballo azul, que simboliza la buena fortuna y el éxito.



Para celebrar la llegada del año de este animal tan cercano al hombre, en la mayoría de los museos de Corea se ofrecen exposiciones relacionadas con el caballo y en las galerías de arte cuelgan cuadros que tienen por tema este bello y noble animal. En el Museo Nacional del Folklore se está realizando en estos momentos la exposición “El poderoso galope del caballo”, en la que se exhiben 63 piezas entre cuadros, fotografías y objetos relaciondos con este tema. En la entrada de la exposición se pueden ver libros antiguos que tratan sobre caballos. Por ejemplo, hay un libro de medicina ecuestre que explica cómo criar a los caballos y curar sus enfermedades. Del mismo modo que la industria automotriz es básica en la sociedad moderna, en las sociedades tradicionales los caballos constituían una de las bases de riqueza; por lo que criar y mantener sanos a los caballos era una de las tareas más importantes del Estado. En la segunda parte de la exposición, se presenta a los caballos como símbolo del estatus del hombre. Por ejemplo, se pueden ver distintas monturas que muestran el estado social y el poder de sus dueños. Asimismo se pueden conocer los diversos sistemas y usos que tenían los caballos en la sociedad tradicional. Por ejemplo, el sistema “mapae” se estableció en 1274 durante la dinastía Goryeo.



“Mapae” era una identificación con forma de medalla que denotaba el rango del portador mediante el número de caballos grabados en la medalla. Cuando un funcionario del gobierno se desplazaba a otros lugares, podía conseguir alojamiento y comida para él y para su bestia mostando su identificación o “mapae” en las posadas y establos, donde también le cambiaban el caballo si era necesario. Como bien de lujo, los caballos sólo estaban al alcance de las clases más altas y los plebeyos muy ricos. Para la mayoría de la población el caballo era un animal inalcanzable, por esta razón trasladaban sus deseos a talismanes que tenían pintados estos animales, pues creían que tenían el poder de alejar los malos espíritus y las enfermedades.



Por otro lado, en las aldeas tenían la costumbre de quemar un muñeco de paja con forma de caballo, para alejar las desgracias de la comunidad. En la tercera parte de la exposición se presentan los ritos que se realizaban para pedir por la salud de los equinos, y también del tratamiendo de divinidades que recibían los caballos de más edad. Además, en los santuarios que había en todos los pueblos para pedir por la salud de los habitantes, siempre se incluía una imagen de caballo hecha de hierro, madera o arcilla, que se ofrendaba como montura a las divinidades protectoras de la tierra y de las aldeas.