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Viaje

La Casa de Corea, un pequeño palacio para deleitar la gastronomía tradicional

2014-07-07

El buen comer es sumamente importante y aún más, cuando uno visita alguna ciudad o país que desconoce, no podemos dejar de pasar de largo los platos más tradicionales y exquisitos. Al deleitar la comida, se puede conocer la cultura y la historia de esos lugares. Será por eso que cuando los extranjeros visitan Corea, una de las cosas que no puede faltar en su agenda de viaje es pasar por los mejores restaurantes, para gozar de los platos típicos y de su increíble variedad, que incluye carnes, verduras, mariscos, pescados, cereales, frutas y mucho más.


La Casa de Corea es el lugar perfecto para disfrutar de la comida y la tradición al mismo tiempo. Será por eso que es un destino imprescindible para los turistas y también el punto de encuentro de los coreanos para sus eventos más importantes. Ubicado en pleno centro de la urbe, este restaurante tiene la arquitectura de un pequeño palacio real. Fue construido en la dinastía Joseon, pero luego fue remodelado para abrir sus puertas al público en 1981, como un centro de cultura tradicional. Desde su apertura hasta el día de hoy mantiene firme su objetivo de dar a conocer la cultura coreana a través de las artes culinarias. Aquí es posible tener acceso a la comida, al baile, la música y las artesanías puramente tradicionales del país. Actualmente se conservan las construcciones típicas, para ofrecer a los visitantes un ambiente de los viejos tiempos, además de tener un entorno verde para poder disfrutar de la naturaleza, aunque estén en el núcleo de la metrópoli.

En sus 7.000 metros cuadrados se observa la arquitectura de la última dinastía de Corea, que llama la atención por sus originales detalles decorativos que solo se pueden ver en Corea. En la entrada principal existe una puerta gigante, muy similar a la de los principales palacios y tiene un cartel indicador en la parte superior del portón con el nombre de la casa, que indica que llegaron al lugar ideal para saborear los platos que comían los monarcas, ver espectáculos tradicionales -tales como el baile de abanicos- aprender a cocinar y al mismo tiempo, comprar los productos y la artesanía más representativa del país.

La Casa de Corea se divide en tres sectores: la entrada principal con un gran patio y una tienda de venta de productos culturales; el palacio central donde se ubica la sala de funciones, la cocina y 5 salones de diferentes tamaños para recibir a los clientes; y un gran jardín en el sector trasero, ideal para dar un paseo después de comer, otros dos salones inmensos y una bodega en donde se conserva el kimchi, el plato más representativo de la gastronomía coreana.
El lugar está abierto los 365 días al año para almuerzos y cenas, y las funciones se representan todos los días a las 7:00 y 8:30 de la noche. Pero además de comer y ver espectáculos, también pueden experimentar las artes culinarias tradicionales participando en clases de cocina, aunque mejor reservar con antelación, pues casi siempre el cupo está completo.


¿Cómo llegar?
La manera más conveniente es tomar a línea 3 o 4 del metro. En la salida número 3 de la estación Chungmuro, podrán ver la entrada principal del restaurante. Es un lugar que realmente merece la pena visitar, para conocer en una sola visita, la cultura de este pequeño pero hermoso país.

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