La presidenta Park Geun Hye ha hecho hincapié en establecer las infraestructuras necesarias para el bienestar de la población norcoreana y poner en marcha otras tareas propuestas en su declaración de Dresde, a fin de alistar el camino hacia la reunificación nacional.
Así, en la primera sesión del Comité Presidencial de Preparación para la Reunificación que encabezó el jueves 7, la jefa de Estado sostuvo que mejorar la calidad de vida de los norcoreanos es importante, no solo en términos humanitarios, sino en el sentido de que constituye una tarea fundamental para la era post reunificación.
Park enfatizó que la misión de Corea del Sur es presentar una visión clara para hacer de la reunificación intercoreana una bendición para todos y disipar la angustia que pueden sentir tanto los coreanos como los pueblos vecinos. Agregó que la reunificación es el camino para superar la situación poco común de la península coreana, así como el remedio fundamental para curar el dolor del pueblo coreano.
La presidenta afirmó también que la reunificación deberá ser más que la unión física de las dos Coreas, para permitir el diseño de un mejor futuro y el crecimiento nacional.