Corea del Sur, Estados Unidos y Japón celebraron el lunes 13 (hora local) una reunión de vicecancilleres para reforzar la disuasión nuclear y alinear estrategias de exteriores y seguridad, incluyendo temas relacionados con China. 

Durante el encuentro, organizado en Washington D.C., los viceministros de Exteriores de los tres países enfatizaron la importancia de la colaboración tripartita. Afirmaron que la amenaza balístico-nuclear es más grave que nunca y abogaron por promover la cooperación a tres bandas para completar el objetivo común de lograr la desnuclearización de la península coreana. 

Cho Hyun Dong, el viceministro surcoreano, destacó los esfuerzos por contrarrestar las provocaciones norcoreanas e inducir al régimen de Pyongyang hacia un completo desarme nuclear, puntualizando que una paz sin desnuclearización no sería tal.

Agregó que Corea del Sur y Estados Unidos reforzarán aún más la defensa combinada contra las amenazas de Corea del Norte, y también la cooperación trilateral con Japón, además de bloquear la obtención de fondos por parte de Pyongyang para fabricar armas de destrucción masiva.

En tanto, el vicecanciller japonés Takeo Mori aludió a la necesidad de mantener un firme marco de cooperación trilateral entre su país, Corea del Sur y Estados Unidos para promover la seguridad regional y mundial. 

Pese a todo, los vicecancilleres de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón reiteraron que las puertas al diálogo con Pyongyang siguen abiertas, instando a Corea del Norte a volver a la mesa de negociaciones. 

En tanto, Estados Unidos hizo especial énfasis en los actuales retos a la seguridad regional, criticando a China por perturbar el orden internacional y la estabilidad no solo en el estrecho de Taiwán, sino también en el Indo-Pacífico. 

Al respecto Wendy Sherman, subsecretaria de Estado estadounidense, comentó que Washington cooperará con sus aliados para contrarrestar a China por desafiar las normas internacionales, aunque igualmente recordó que la administración de Biden sigue dispuesta a dialogar con Beijing pese a la polémica generada por los globos espías chinos.