Las condiciones en que se dio el suicidio de Jang ja Yeon han sacado a flote una serie de negocios turbios en el mundo de la farándula, involucrando investigaciones policíacas en torno a varias figuras prominentes del espectáculo y los medios de comunicación en Corea.
La jefatura de policía de Bundang anunció que a partir de la semana próxima se convocarán oficialmente a los involucrados con la actriz para definir la naturaleza de las relaciones personales y profesionales que pudieron haber creado condiciones de trabajo éticamente problemáticas para la joven.
En vista a las repercusiones que tendrán los resultados de esta investigación en el negocio del espectáculo, y el gran interés que el asunto ha generado entre el público, la policía está poniendo su mayor esfuerzo en obtener evidencias y testimonios en relación al caso. El representante de la agencia a la que pertenecía la fallecida ha permanecido en Japón desde que ocurrió el incidente, manteniéndose alejado de la prensa y sin responder a los intentos de la policía de establecer contacto.