Dongdaemun Design Plaza, conocido como DDP por sus siglas en inglés, es un complejo cultural que abrió sus puertas en 2014, tras un largo periodo de construcción en el terreno donde antes se ubicada el estadio deportivo de Dongdaemun. Desde su inauguración, se ha convertido en todo un emblema de la ciudad por su diseño sumamente original, obra de la arquitecta iraquí, Zaha Hadid, primera mujer ganadora del Premio Pritzker, conocido como “el equivalente” al Premio Nobel, pero de arquitectura.
La primera impresión de los visitantes al entrar es como de haber viajado al espacio. El complejo es tres veces más grande que un estadio de fútbol pero está cubierto con un techo curvo de aluminio, que da una sensación cálida. El DDP es considerado hoy como un eje cultural de Corea, pues en su interior se llevan a cabo numerosos eventos y funciones relacionados con arte, diseño, moda, y todo lo relacionado con la cultura. El edificio consta de 2 subsuelos y 4 pisos que comparten armoniosamente su espacio con terrazas y patios, para servir de escenario de desfiles, exposiciones y conciertos, así como cualquier acto de interés para el público. Durante toda la semana se llevan a cabo diversos programas, así que pueden verificar en su página web antes de visitarlo. De todas formas, en el complejo se ubica un museo sobre la historia de Dongdaemun, una feria y numerosos establecimientos gastronómicos que permiten que su visita sea más placentera.
Seúl es una ciudad enorme rodeada de altos edificios; y si bien hay muchos espacios culturales y artísticos, no había un complejo de esta magnitud dedicado especialmente al diseño y la moda. Será por ello que este lugar es apodado como ‘un oasis cultural y artístico dentro de la urbe’. Ya desde la entrada percibirán que están dentro de una obra arquitectónica especial, por las escaleras y columnas curvas, que dan la sensación de estar en el espacio. Solo el hecho de observar la arquitectura de cada pared, techo o suelo puede resultar interesante… Pero si además recorren cada rincón, estarán más satisfechos con la visita.
Por ejemplo, al llegar al cuarto piso -subiendo unas escaleras en forma de caracol pero que parecen un túnel- encontrarán un salón abierto al público, que cuenta con cómodos sillones y un piano en el centro, para que cualquiera pueda tocar o escuchar. En la azotea hay una terraza y un jardín decorado con flores y plantas para disfrutar de la naturaleza, y cuando empieza a oscurecer, se encienden unas luces de un color plateado que decoran todas las paredes y las columnas. Finalmente, el jardín con 20 mil rosas artificiales e iluminadas con luces LED, les causará una gran emoción. Dongdaemun Design Plaza está ubicado cerca de los grandes centros comerciales, un mercado enorme y el riachuelo Chunggye, así que también pueden aprovechar para conocer otras atracciones de la ciudad.
Dongdaemun Design Plaza se sitúa a la salida número 1 de la estación que lleva el mismo nombre de las líneas 2, 4 y 5 del metro. La entrada es gratuita pero si quieren conocer más a fondo la arquitectura, la historia y todo sobre el diseño de este complejo a través de un guía, pueden hacerlo pagando 5.000 wones por persona. Está abierto todos los días –con excepción de los lunes- desde las 10 de la mañana hasta las 7 de la noche, pero los miércoles y viernes es posible visitarlo hasta las 9 de la noche.