El público del estadio cometió actos de discriminación racial contra un futbolista surcoreano que juega en la Bundesliga alemana.
La víctima es el jugador Park Yi Young, del club Türkgücü Munich, quien durante un partido contra el Waldhof Mannheim celebrado el 3 de octubre, fue objeto de agresiones verbales por parte de los espectadores, que lanzaron graves expresiones racistas. El incidente obligó al árbitro a detener el encuentro para advertir al público con una posible suspensión de continuar los actos de discriminación racial.
Una vez finalizado el partido, Park lamentó en las redes sociales que siga habiendo gente que cree que alentar a su equipo es sinónimo de insultar al otro, al tiempo de insistir en conductas que atentan contra una cultura futbolística sana.