Según datos publicados por la Oficina Nacional de Estadística, el ingreso mensual promedio por hogar durante el primer trimestre del año fue de 5.122.000 wones, cifra que supone un aumento del 1,4% respecto al mismo trimestre del año anterior.
No obstante, considerando la tasa de inflación del 3%, el ingreso real de los hogares remitió un 1,6%, el mayor descenso en siete años, desde el primer trimestre de 2017.
Considerando la inflación, la renta real del trabajo disminuyó un 3,9%, la mayor caída desde que comenzaron a recopilarse datos relacionados.
En tanto, el promedio de gasto de los hogares durante el primer trimestre fue de 3.984.000 wones, un 2,5% más que el mismo trimestre del año anterior.
Por su parte, aquellos en el 20% inferior de la pirámide de ingresos, registraron una balanza negativa de 357.000 wones, siendo el único grupo con déficit, indicando que las dificultades entre los hogares con bajos ingresos persisten.