La subsecretaria de Defensa en funciones de Estados Unidos, Jennifer Walsh, declaró el martes 4, que las armas nucleares y bioquímicas de Corea del Norte amenazan la estabilidad internacional y debilitan el sistema global de no proliferación.

La subjefe del Pentágono afirmó en un informe al Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes estadounidense, que tales armas atentan contra Estados Unidos y sus aliados, además de violar varias resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

También enfatizó que las fuerzas combinadas surcoreano-estadounidenses deben estar preparadas para desplegar operaciones en condiciones de contaminación de las llamadas CBRN -o armas químicas, biológicas, radiológicas y nucleares- ante el riesgo de que el dirigente norcoreano Kim Jong Un use armamento de destrucción masiva en la península coreana.

Walsh explicó que tras considerar lo anterior, Washington coopera con Seúl para mejorar la capacidad de descontaminación necesaria para optimizar el nivel de disuasión contra las CBRN en Corea.