De cara a próximos días feriados, como el Día de la Fundación de Corea (3 de octubre) y el Día del Hangul (9 de octubre), el Gobierno surcoreano ha solicitado extremar las precauciones, llamando a evitar desplazamientos y reuniones sociales y a cumplir estrictamente con las pautas de seguridad. 

Durante una reunión sobre COVID-19 del martes 28, el premier Kim Boo Kyum enfatizó que hay repunte de casos fuera de la zona capitalina, y aumenta la preocupación por los contagios de ruta desconocida, que suponen casi un 40% del total. 

El premier destacó que el Gobierno hará todo lo posible para frenar la propagación del virus antes de esas fiestas, al tiempo de solicitar a los gobiernos locales replantear los festivales de otoño y cancelarlos, aplazarlos, o al menos establecer medidas especiales para cada festival. 

También urgió al Ministerio de Justicia y al Ministerio de Empleo a impulsar las pruebas de diagnóstico en barrios y establecimientos con alta concentración de extranjeros, explicando que el 16,2% de los positivos en el país provienen de ese origen. 

En cuanto a relajar las pautas de distancia social, el premier afirmó que si bien el país debe intentar reanudar la vida cotidiana paulatinamente, solo será posible cuando la vacunación consiga disminuir el riesgo de contagio y la propagación pueda ser manejada por el sistema médico y sanitario del país.