A partir del 12 de noviembre, Corea del Sur reducirá los impuestos al combustible un 20%, en un intento por aliviar la creciente presión inflacionaria ante el encarecimiento del petróleo.
El oficialista The Minjoo y el Ejecutivo adoptaron esa decisión el martes 26, durante una reunión de consulta política en la Asamblea Nacional.
Concretamente, el precio de la gasolina bajará 164 wones por litro, el precio del gas butano 40 wones por litro, y el precio del diésel 116 wones por litro.
Asimismo, decidieron suprimir temporalmente los aranceles de importación del gas natural licuado (GNL), pasando del actual 2% a un 0%.
Estas medidas provisionales se mantendrán durante seis meses, hasta el 30 de abril.