La Fiscalía ha solicitado cinco años de prisión y una multa de 500 millones de wones para Lee Jae Yong, presidente de Samsung Electrónica, por una dudosa fusión de filiales y fraude contable para facilitar la transición del poder ejecutivo en la empresa. 

Durante la audiencia ante el Tribunal del Distrito Central de Seúl el viernes 17, la Fiscalía señaló que con esos movimientos Lee erosionó el mercado de capitales para favorecer su posición en el grupo Samsung y obtener un beneficio económico directo. 

La Fiscalía le acusó de manipular el valor de mercado de Cheil Industries, donde figura como accionista mayoritario, y de propiciar una fusión perjudicial para Samsung C&T. También afronta cargos por haber inflado los activos de Samsung Biologics, filial de Cheil Industries mediante fraude contable estimado en 4 billones de wones.

Afirmaron que Lee planificó y ejecutó esos movimientos sistemáticamente durante varios años, con el objetivo de asegurar su posición al frente del conglomerado.

En tanto, la defensa de Lee insiste en su inocencia, alegando que todos los hechos cuestionados están dentro de una gestión empresarial legítima.

El juicio llega a su fin más de tres años y dos meses de formular acusaciones. Se espera una sentencia en primera instancia a comienzos de 2024.