Los positivos o aislados por COVID-19 sufrieron confusión y demoras para votar anticipadamente en las presidenciales el sábado 5, por descordinación en la Comisión Nacional Electoral. Según informan, muchos centros de votación ni siquiera disponían de urnas y tuvieron que usar canastas o cajas de cartón. 

Ante el caos, el Parlamento convocó una sesión urgente el lunes 6 para solicitar un informe de la Comisión Electoral, donde tanto oficialistas como opositores, criticaron a dicha entidad, 

Park Chan Jin, subsecretario general de la Comisión Nacional Electoral, compareció ante la cámara y admitió la falta de coordinación, comprometiéndose a garantizar el derecho a voto de todos los ciudadanos en un ambiente seguro el 9 de marzo, día de jornada electoral. Como primera medida, deshabilitarán las urnas provisionales para positivos y usarán las mismas del resto, una vez finalice el horario normal de votación a las 6:00 de la tarde. 

En caso de victoria en las presidenciales por una mínima diferencia, el reciente caos en la votación anticipada podría originar sospechas sobre posible fraude electoral. Al respecto, la Comisión Nacional Electoral afirma que todo el procedimiento se hizo con transparencia y ante los observadores recomendados por los propios partidos, descartando un posible fraude.