Al relajar las pautas de prevención de COVID-19, la actividad hotelera en Corea del Sur ha recuperado el nivel previo a la pandemia. 

Según datos de la Oficina Nacional de Estadística, en julio el índice de producción del sector hostelero marcó 108,1 puntos, mejorando un 29,9% respecto a hace un año. El nivel es superior incluso al registrado en 2019, de 99,5 puntos. 

Dicho índice, que refleja la actividad de restaurantes y hoteles −u otros establecimientos que ofrecen servicios de alojamiento− bajó durante 14 meses consecutivos, desde enero de 2020 hasta febrero de 2021, para empezar a remontar lentamente a partir de entonces y disfrutar de una subida continua desde septiembre de 2021 hasta julio de 2022, por 11 meses corridos. 

Por otra parte, las ventas al por menor −otro importante indicador del consumo nacional− mermaron en julio por primera vez desde 1995 por quinto mes consecutivo, al situarse en 117,9 puntos, un 0,3% menos que en junio. 

El Ministerio de Estrategia y Finanzas analiza que, pese al contraste entre los citados datos, en general es patente la recuperación del sector servicios, así como del consumo.

En este contexto, el Banco de Corea vaticina que el consumo privado aumentará un 4% en 2022, si bien los altos precios pueden influir negativamente al debilitar el poder adquisitivo de los hogares. Esta nueva estimación supera el 3,7% vaticinado anteriormente, al contrario de la previsión de crecimiento económico, que el banco central rebajó del 2,7% al 2,6%.