Ante el reciente repunte de casos de COVID-19, la Agencia de Control y Prevención de Enfermedades anunció el lunes 7 que postergará la retirada adicional de medidas sanitarias contra la pandemia. Esto implica que por lo pronto seguirá siendo obligatorio el uso de mascarillas en hospitales generales y otras instalaciones médicas de similar nivel.

Una fuente de la agencia explicó que si bien se mantienen a la baja tanto la mortandad como la incidencia de patologías graves entre pacientes de COVID-19, los nuevos contagios han aumentado de forma consecutiva durante las últimas seis semanas, de ahí la prudencia de las autoridades de salud pública y de los expertos sobre retirar las medidas preventivas vigentes.

Se estima que la flexibilización adicional de las pautas sanitarias, que estaba prevista para comienzos o a mediados de agosto, será aplazada al menos hasta finales de este mes, aunque la decisión final dependerá del ritmo de repunte de casos.

Sanidad calcula que de seguir el aumento de casos a una velocidad similar a la de las semanas anteriores, a mediados de agosto el volumen de nuevos casos podría ascender hasta 76.000 contagios diarios.