El año pasado, las cifras de la Oficina de Estadísticas registraron 372.000 fallecimientos, un 17,4% más que en 2021, cuando murieron 310 mil personas, y la cifra más elevada desde que se empezaron a recopilar ese tipo de datos.
Como principales razones de tan significativo incremento, los expertos señalan a dos factores: el aumento de población en edad avanzada y el marcado repunte de muertes por COVID-19. No en vano, en 2022 un total de 31.280 personas fallecieron a causa del coronavirus, multiplicando por más de seis veces los 5.030 fallecidos por dicho motivo en 2021, y un 8,4% del total de muertes en el país.
Tan drástico aumento llevó al COVID-19 a escalar puestos en el ranking de causas de muerte, pasando del duodécimo lugar en 2021 al tercer puesto en 2022, solo por detrás del cáncer y las patologías cardíacas.
Como principales causas de muerte después del coronavirus figuran la neumonía y las enfermedades cerebrovasculares.
A su vez, las cifras muestran un descenso del 3% de suicidios, que pasan a situarse como la sexta causa principal de muerte. No obstante, y pese a ese descenso, la tasa de suicidios duplica el promedio de la OCDE.
En cuanto a la edad, más del 50% de los fallecidos superaba los 80 años. La mortalidad en este grupo etario aumentó más del 17% respecto al año anterior, al ser con diferencia los más vulnerables a los efectos del COVID-19.
Al respecto, la Oficina de Estadísticas anticipó que, considerando el notable aumento de muertes por COVID-19 del año anterior, es probable que el total de fallecimientos por dicha causa remita durante el año en curso.