Un buque petrolero con bandera de Corea del Sur fue incautado en el estrecho de Ormuz por los Guardianes de la Revolución de Irán. 

El incidente tuvo lugar el lunes 4, cuando los Guardianes de la Revolución y unos helicópteros de Irán enviaron hombres armados al barco Hankuk Chemi, para llevarlo al puerto de Bandar Abbas, en Irán. 

El Gobierno iraní ha justificado la incautación alegando que el buque surcoreano vulneró normas medioambientales marítimas. No obstante, los tripulantes surcoreanos refutaron la acusación, al explicar que dicho barco no ha incumplido leyes ambientales, y resaltaron que el ejército iraní ni siquiera ofreció una explicación concreta durante la incautación. 

Dicho buque cisterna surcoreano transportaba 7.200 toneladas de petroquímicos desde Jubail en Arabia Saudita cuando fue interceptado. A bordo viajaban unos veinte marineros de nacionalidades surcoreana, indonesia y birmana.

El incidente llega entre las crecientes tensiones militares entre Teherán y Washington en la zona del golfo Pérsico.