El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, ha críticado enérgicamente los campos de concentración de prisioneros políticos de Corea del Norte, calificándolos de "sistema perverso".
Asimismo, aseguró que se esforzará por adoptar una resolución condenando la seria violación de los derechos humanos en el país comunista durante la asamblea general de la ONU, con el apoyo de la Unión Europea, Australia y Japón, entre otros.
Durante la reunión a nivel ministerial sobre derechos humanos norcoreanos llevada a cabo en Nueva York el día 24, presidida por Kerry, éste resaltó que ya es hora de abolir los campos de concentración del régimen comunista, práctica que no puede existir en el mundo actual, donde sus ocupantes son víctimas de torturas, abortos forzosos y otras tantas crueldades.
Recordó que tres ciudadanos estadounidenses también fueron enviados a dichos campos y obligados a realizar trabajos forzados, sin siquiera un juicio justo.
En tanto, el ministro de Exteriores de Japón, Fumio Kishida, denunció a Corea del Norte durante la reunión por el secuestro de japoneses en el pasado. Se comprometió a trabajar con la Unión Europea para presentar otra resolución sobre derechos humanos norcoreanos durante la asamblea general de la ONU.