Las autoridades militares de Corea del Sur y Estados Unidos mantienen una controversia ante los fallos encontrados en algunos misiles guíados buque-aire SM-2.
Los defectos fueron detectados en 2010 y 2012, cuando dichos proyectiles fracasaron en su objetivo durante las maniobras navales bienales RIMPAC o Borde del Pacífico, efectuadas en Hawái.
Los misiles -puestos a prueba en 2012- fueron adquiridos hace tiempo por Corea del Sur, por lo que el plazo de garantía para presentar reclamaciones ya ha expirado. No obstante, los lanzados en 2010 fueron comprados justo antes de las maniobras en Hawái.
Al respecto, la Administración de Programas de Adquisición de Defensa de Corea del Sur dio a conocer que las Fuerzas Armadas exigen actualmente a la Marina estadounidense una indemnización por los misiles defectuosos. Por ello, si el país norteamericano no acepta la petición sobre los misiles lanzados en 2010, el Gobierno surcoreano podría postergar el pago de los 8 millones de dólares aún pendientes de liquidar del precio total de la compraventa de misiles, que ascendió a 157 millones de dólares.