La Marina estadounidense ha desplegado su plataforma naval SBX 1 hacia las aguas internacionales que rodean la península coreana.
El buque, considerado una base de radares sobre el mar, está equipado con una estructura de 116 metros largo y 85 metros de altura, en la que está instalada un radar, capaz de detectar un objetivo del tamaño de una pelota de béisbol a una distancia de 2.000 kilómetros.
Junto a su SBX 1, Estados Unidos también ha acercado a la península coreana su destructor de misiles USS Fitzgerald.
La agencia de noticias CNN informó al respecto, citando a una fuente del Pentágono, que el despliegue de estas naves tiene por objeto vigilar las actividades del Ejército norcoreano, con miras a un ensayo con misiles que Corea del Norte podría efectuar dentro de las próximas semanas.
La Casa Blanca, por su parte, declaró que considera muy serias las amenazas bélicas del régimen de Pyongyang; mas sin embargo, aún no ha detectado movimientos extraordinarios en el Ejército del país comunista.