Las personas que incurran en violencia doméstica más de dos veces en tres años, serán arrestadas conforme a las nuevas normas que adoptará la Fiscalía surcoreana.
Este sistema, que ya se aplica a casos de violencia ordinaria, a partir de ahora también se aplicará para castigar a los agresores de violencia doméstica con reincidencia.
Asimismo, de ahora en adelante será posible solicitar la adopción de medidas de seguridad contra los ofensores, en casos de abuso ordinario o chantaje, que no podían ser procesados por la justicia si la víctima no lo deseaba. Según el derecho penal, las medidas de seguridad son sanciones impuestas a una persona física por su peligrosidad delictiva o criminal tras cometer un hecho delictivo, para lograr su inocuización, reeducación, reinserción o reforma.
En Corea del Sur, desde hace un tiempo se ha señalado que la penalización contra los delincuentes de violencia doméstica no era lo suficientemente fuerte, al rondar sus índices de arresto y de procesamiento apenas el 1% y el 3% respectivamente; mientras que la tasa de acusaciones anuladas supera el 15%.