En un artículo titulado, "Corea del Sur intenta frenar su creciente deuda y evitar una crisis", el diario estadounidense 'The Washington Post', calificó como "seria", la situación de la deuda de las familias surcoreanas.
El rotativo informo de que "mientras que la tendencia en el mundo desarrollado es la de desprenderse de sus deudas, los surcoreanos continúan tomando préstamos a un ritmo acelerado, lo que según los economistas, es insostenible y potencialmente peligroso".
El informe detalla que, conforme a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, OCDE, la deuda de los hogares surcoreanos representa el 155% de su renta disponible. Señala, asimismo, que ese porcentaje supera al de EEUU en la víspera de su crisis hipotecaria, y sitúa la deuda de Corea del Sur por encima de otras grandes economías asiáticas, como las de China y Japón.
El diario añade que durante la última década, la deuda de las familias surcoreanas ha aumentado un 13% anual, lo que supone el doble del crecimiento de su Producto Interior Bruto.
Asimismo, advierte que de desplomarse los precios de la vivienda, los surcoreanos serían incapaces de pagar sus deudas y los bancos no podrían recuperar su dinero.
El Washington Post ve como causas "el largo auge de la economía coreana, que la ha llevado a endeudarse de forma extrema, y la excesiva importancia del éxito", que empuja a los coreanos a gastar dinero en cosas como tutores privados o colegios elitistas -para asegurar su notoriedad social- y en bolsos de lujo o apartamentos nuevos, para luego demostrarla.
Finalmente, recuerda que Corea solía ser un país de ahorradores, hasta que la crisis financiera asiática afectó al país en 1997; tras lo cual Seúl disminuyó su control sobre los tipos de interés, estimulando la compra de vivienda como parte del plan de recuperación.