Kim Young Hwan, activista surcoreano en pro de los derechos humanos norcoreanos, ha reiterado que, durante su encierro en las penitenciarías chinas, recibió torturas eléctricas y violencia física.
En un encuentro con los periodistas -previo a ser interrogado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos de Corea del Sur, el lunes 30- Kim explicó en detalle las injusticias recibidas en China.
Especificó que el pasado 15 de abril, recibió constantes golpes y torturas con dispositivos eléctricos entre cinco y ocho horas seguidas. Agregó que, los días previos, desde el 10 de abril, las autoridades policiales chinas ni siquiera les dejaron dormir durante toda una semana.
Además, describió detalladamente todos los tratos inhumanos recibidos durante su detención en China.
Esta denuncia del activista surcoreano ha elevado la tensión diplomática entre Seúl y Beijing, dado que el primero exige una respuesta específica sobre lo ocurrido; mientras que el segundo, niega haber cometido dichos actos.