Un equipo de investigación del Centro Nacional de Cáncer ha realizado un estudio comparativo entre 2.700 personas -algunas pacientes con cáncer de colon- para comprobar la correlación entre hábitos alimenticios y cáncer de colon.
Según los resultados, el grupo que se alimentó de platos tradicionales coreanos -basados en verduras, pescado, setas y soja, además de salsas fermentadas como la de soja, la pasta de soja "doenjang" y la pasta de chile "gochujang"- vio reducido en un 60% el riesgo de sufrir este tipo de cáncer. También aquellos que realizaron una "dieta sana" basada en frutas y productos lácteos obtuvieron un resultado similar.
Por el contrario, el grupo que se alimentó de "comida occidental" como hamburguesas y pizzas presentó el doble de riesgo de padecer este tipo de cáncer.
Según el equipo de investigación, es primordial comer variado y equilibrado, pues el cáncer de colon parece estar estrechamente ligado a los hábitos alimenticios y al medio ambiente.