Corea del Sur registró por primera vez más de 10.000 millones de dólares de déficit comercial en el mes de enero, al retroceder las exportaciones, concretamente del sector chips, que perdió un 44%.
Durante el primer mes de 2023, las exportaciones marcaron 46.270 millones de dólares, un 16% menos que el año anterior, tendencia que se mantiene a la baja desde octubre. La contracción se atribuye principalmente al sector chips, pues la exportación de memorias - uno de los productos surcoreanos con mayor demanda internacional- bajó más del 44%.
Por destinos, los envíos hacia China remitieron un 30%, aunque también bajaron las exportaciones a ASEAN y Estados Unidos.
El frenazo en las exportaciones se achaca a la desaceleración de la economía mundial, bajo el impacto de la inflación y la subida de tipos, aunque también a la menor demanda en el mercado global de semiconductores.
En tanto las importaciones remitieron un 2,6% hasta 58.960 millones de dólares.
Así, la balanza de comercio exterior de Corea del Sur arrojó en enero un descubierto de 12.690 millones de dólares, encadenando déficit por diez meses consecutivos. La última vez que el déficit comercial se alargó por un periodo similar fue hace 25 años, cuando el país vivió una de las peores crisis financieras de su historia, a finales de la década de 1990.
Ministerios y entidades vinculadas observan con preocupación el descenso de las exportaciones y el déficit comercial. En respuesta, intentarán reacivar los envíos al exterior, principalmente en el sector defensa y de energía nuclear. Finalmente, mostraron confianza en una paulatina mejora al desaparecer los factores estacionales y la reactivación de la economía china.