Corea del Norte ha levantado por primera vez en cinco años las restricciones a la entrada de turistas occidentales, según ha revelado el testimonio de un viajero francés que visitó el país el 20 de febrero.
En una entrevista en vídeo difundida el jueves 27 por la emisora estadounidense Radio Free Asia, el ciudadano francés Pierre-Emile Biot explicó que viajó a Corea del Norte como parte de un paquete turístico de cinco días, cuyo recorrido comenzó en la ciudad china de Yanji y llevó a los viajeros hasta la zona económica especial norcoreana de Rason.
Según Biot, durante su estancia, a los visitantes se les ofrecía cerveza local en cada comida y podían abonar sus gastos principalmente en yuanes chinos. Aunque el testimonio no especificó cuántas personas integraban el grupo ni su procedencia exacta, una fotografía tomada por el francés frente a las estatuas de los difuntos líderes norcoreanos Kim Il Sung y Kim Jong Il sugiere que la mayoría de los viajeros provenían de países occidentales.
Tras la reapertura parcial de sus fronteras, que tuvo lugar después de que las cerrara por completo durante la pandemia de COVID-19, Corea del Norte había permitido únicamente la entrada de turistas rusos y no autorizaba viajes en grupo de otras nacionalidades. Sin embargo, según el testimonio de Biot, este parece ser el primer caso en que Pyongyang permite una visita grupal de ciudadanos occidentales.