El grupo de la orden budista Jogye, que regresó de su viaje a Corea del Norte el miércoles 7, ha manifestado que la reciente visita sirvió para sentar las bases para un mayor intercambio civil y cultural entre las dos Coreas.
Los líderes de dicha denominación religiosa ofrecieron el jueves 8 una rueda de prensa para resumir su estancia en Corea del Norte. Informaron que allí organizaron un servicio religioso conjunto con los budistas norcoreanos y hablaron con ellos de la cooperación que podría entablarse para tareas concretas como la trascripción al coreano de escrituras sagradas del budismo.
Asimismo, el grupo anunció que acordó con la parte norteña dar continuación al pacto que establecieron en enero de 2010 para la construcción en Pyongyang de un centro con fines humanitarios a cargo de la orden Jogye.