El Gobierno de Corea del Sur ha fijado en el 3,7% su meta de crecimiento económico para el próximo año. El índice estimado es 0,1 punto porcentual menos que la previsión que dio el Gobierno para 2011.

El pronóstico se basa en el análisis del Ministerio de Planificación Estratégica y Finanzas, que prevé una ralentización de las exportaciones surcoreanas en 2012 como consecuencia de la desaceleración de la economía mundial.

En este contexto, la cartera publicó el lunes 12 un paquete de políticas económicas para el año venidero cuyos ejes son la ejecución temprana de los presupuestos fiscales para el primer semestre del próximo año y la revitalización de la economía nacional mediante el fomento de la demanda nacional.

El Ministerio de Finanzas vaticina, asimismo, que en 2012 el superávit por cuenta corriente de Corea mermará con relación a este año; mientras que el consumo privado aumentará un 3,1% y los precios subirán a un ritmo más pausado, marcando una tasa inflacionaria del 3,2%. Este último fenómeno se producirá gracias a la estabilización, tanto de los precios internacionales del petróleo y otras materias primas, como de la oferta y demanda de bienes agrícolas.