Un número récord de familias surcoreanas abandonaron la vida urbana durante el pasado año, para radicarse en zonas rurales.
El Ministerio de Agricultura, Bosque, Pesca y Alimentación, detalló el jueves 23 que en 2011 unas 15 mil familias se mudaron a regiones apartadas de las grandes ciudades; cifra que supone un incremento del 158% respecto al año anterior.
Por edades, las personas de entre 40 y 60 años fueron mayoría, al ocupar el 59,2% de esta nueva población rural de Corea.
Las familias que deciden vivir en el campo se dividen entre las que están dispuestas a hacer de la agricultura su principal fuente de vida, y las que optan por radicarse en poblados no muy lejanos de la capital, sólo por disfrutar de una vida próxima a la naturaleza.