Estados Unidos ha manifestado que podría reconsiderar el despliegue del sistema antimisiles THAAD en la península coreana, si Pyongyang desiste de desarrollar armas nucleares y misiles.
El asesor adjunto de seguridad nacional de la Casa Blanca, Ben Rhodes, declaró al respecto el miércoles 7 - al ser preguntado sobre si se podría cancelar la instalación del THAAD en Corea del Sur- que Washingon podría barajar dicha posibilidad en caso de renunciar Corea del Norte al desarrollo nuclear y balístico.
El funcionario dio a entender así, que el citado sistema antimisiles será desplegado con fines defensivos y para contrarrestar las amenazas norcoreanas.
Mientras tanto, se ha dado a conocer que el martes 6, fecha en la que se celebró una cumbre entre Park Geun Hye y Barack Obama en Laos, Estados Unidos efectuó un ensayo de artillería con un misil balístico intercontinental. La Fuerza Aérea estadounidense detalló que el proyectil fue lanzado desde California y cayó cerca de las Islas Marshall, en el Pacífico, tras recorrer 6.700 kilómetros. Se analiza que con este ensayo, Washington pretendió enviar un mensaje de advertencia a Corea del Norte.