Cada vez más países solicitan a la firma Apple una explicación sobre su actividad de recogida de datos de localización de los usuarios de iPhone.
Los gobiernos de Corea del Sur, Alemania, Francia, Italia y Taiwán ya han enviado o planean enviar consultas formales al fabricante estadounidense de teléfonos inteligentes.
Solicitarán a Apple que explique por qué ha estado recopilando datos sobre la ubicación de los usuarios de iPhones y dónde y cómo se ha utilizado esta información. Este movimiento internacional se dirige a demostrar si el almacenamiento de los datos de usuarios viola las leyes de protección de la privacidad.
Por otra parte, la Comisión Federal de Comunicaciones y la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos han abierto sendas investigaciones.