Ante la popularidad de los alimentos procesados, cada vez hay más coreanos que están cerca del límite recomendado de consumo de azúcares.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Corea, publicó el día 24 un análisis sobre el estado nutritivo de la población que abarca los últimos tres años.
Los resultados indican que en 2010, los ciudadanos ingirieron diariamente un promedio de 61,4 grados de azúcar, que representa un aumento del 23% en tres años. Explica que este consumo desmesurado de azúcar se debe a las comidas procesadas como refrescos gasificados, galletas y pasteles.
La entidad subraya que, pese a que la mayoría de la población aún no llega a la cantidad límite de azúcar recomendada por la Organización Mundial de la Salud, la situación es preocupante por el rápido crecimiento en el consumo de alimentos artificiales.