El 27 de septiembre, Corea del Sur celebró la primera conmemoración del Día de las Familias Separadas, con la presencia de más de 400 participantes.

Durante el acto, Kim Yung Ho, ministro de Reunificación, resaltó la urgente necesidad de que Corea del Norte muestre una actitud más colaborativa para resolver no solo la cuestión de las familias separadas, sino también la situación de los prisioneros de guerra y de las personas secuestradas y retenidas. Kim instó con firmeza a las autoridades del Norte a responder rápidamente y con sentido de responsabilidad histórica frente al desafío de las familias separadas.

Además, Kim expresó su crítica hacia Corea del Norte por su enfoque en el desarrollo de armas nucleares y misiles, dejando de lado las preocupaciones fundamentales de su propio pueblo. Cuestionando especialmente la falta de respuesta del Norte a la propuesta del gobierno surcoreano realizada el año pasado para tratar el asunto de las familias separadas, y lamentó la interrupción de los canales de comunicación entre ambos países.

Según información proporcionada por el Ministerio de Reunificación, al finalizar agosto, de las 133.685 personas que solicitaron reunirse con sus seres queridos separados, 93.277 ya habrían fallecido, dejando solo a 44.408 aún vivos.

La instauración del Día de las Familias Separadas, conmemorado el día previo al festivo de Chuseok, surge tras la aprobación de la Ley de Familias Separadas en marzo. Su objetivo es brindar consuelo a quienes sufren la separación y consolidar un consenso nacional para abordar esta problemática.

[Photo : YONHAP News]