Los ministros de Exteriores del G7, grupo que integran Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y Japón, han condenado enérgicamente a Corea del Norte por el reciente lanzamiento de un cohete para poner en órbita un satélite espía.

En un comunicado subrayaron que incluso si Corea del Norte alega motivos de reconocimiento militar, usar tecnología de misiles balísticos va contra las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.

El G7 exigió a Corea del Norte que renuncie a sus programas nucleares, de armas de destrucción masiva y de misiles balísticos, al tiempo de enfatizar que la transferencia de armas entre Rusia y Corea del Norte también incumple las resoluciones de la ONU.

Por su parte Jens Stoltenberg, Secretario General de la OTAN, también expresó su preocupación, señalando que el reciente lanzamiento de Corea del Norte aumenta la tensión y supone una grave amenaza para la seguridad regional e internacional.

Desde otro prisma, China pidió calma y moderación, y exhortó a todos los implicados a resolver sus legítimas diferencias mediante un diálogo constructivo.

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